Seguimos con el mes patrio, y vamos complicando las recetas (bueno no complicar, sino aumentar el reto), y esta vez preparé otro platillo que es casi una obligación comer en Septiembre: un mole.
La palabra mole viene del nahuatl "molli" que significa salsa, potaje o mezcla. En México, al mole se le conoce a la salsa elaborada a base de chiles y especias.
El mole más conocido a nivel mundial es este, el mole poblano, que practícamente es un platillo nacional. Su historia remonta otra vez a los conventos poblanos, donde las monjitas (sin nada que hacer, pero a las que les debemos los chiles en nogada, el rompope y otras delicias), empezaron a moler diferentes chiles secos y otros condimentos en un metate (piedra especial para moler), que virtieron sobre un caldo de guajolote y en el último momento, pusieron el ingrediente que le da el toque especial: el chocolate.
Mi versión de mole, es un poco más express (ya que es para menos porciones) y fácil de hacer.
Necesitas:
4-6 piezas de pollo o guajolote cocidas (muslo, pierna, pechuga, lo que gustes)
1 1/2 litro aprox. del caldo de cocción del pollo o guajolote
5 chiles mulato
2 chiles pasilla
4 chiles ancho
1/4 de taza de almendras peladas
1/4 de taza de cacahuates pelados
1/4 de taza de pasitas
1/2 tortilla quemada (así es: carbonizada)
2 pimientas negras
1 clavo de olor
1 raja de canela
1 anís estrella
2 cucharads de ajonjolí
1/2 cebolla
1 ajo grande o 2 chiquitos
2 jitomates asados
1 chile chipotle desvenado
1/2 tablilla de chocolate mexicano
1/4 de taza de manteca (... y si te quieres cuidar, puedes usar aceite vegetal)
Desvena los chiles secos y los freímos con la mitad de manteca o aceite hasta que esten brillosos (si se queman, ya valió la receta, lo tendras que hacer), reserva.
En la misma grasa, sofríe las almendras, cacahuates, pasas, la tortilla y las especias, reserva.
En un comal, tuesta el anís y el ajonjolí (sin quemar también eh!), reserva.
Ahora sí, muele los ingredientes pasados en grasa, junto con el anís, el ajonjolí, la cebolla y el ajo, con muy poquita agua en un metate, o bueno en el procesador de alimentos (Por favor, a menos que te estes ligando al técnico, no uses la licuadora o un turmix, ya que se te va a descomponer), hasta lograr una consistencia bien homogénea, no se deben reconocer los ingredientes.
Calienta la mitad de la manteca a fuego bajo y vierte la mezcla hasta que se deshaga y ya no haga brumos, reserva. (muy bien haz hecho una pasta de mole, esta la puedes guardar una semana en tu refri, continuemos con la receta).
Por otro lado, en una cacerola freímos con poquito aceite las piezas de pollo o guajolote hasta que estén dorados.
Lícua los jitomates y el chile chipotle con poquitita agua y viértelo sobre el pollo y cuando no quede nada de líquido, agrega la mitad del caldo, sazona con sal.
En otra cacerola, mezcla la pasta del mole con la otra mitad del caldo, hasta que se disuelva, a fuego medio.
Agrega el chocolate y cuando se deshaga, incorpora el pollo junto con su líquido de cocción y cocina por 10 a 20 minutos hasta que espese de nuevo.
Sirve con arrocito y tortillas.
Ves no es tan díficil, sólo necesitas un día estar en la cocina, pero bueno puedes hacer la parte de la pasta, guardar y hacer lo demás al día siguiente ;).